Franco Argüelles: “Cuando uno compone de mentira el éxito es de 15 días”
Viernes, 29 de Junio de 2012 06:00 | Escrito por Redacción | 
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Franco Argüelles
Sólo tenía 14 años y, a partir de entonces, empezaron las horas de ensayo a escondidas. Días y semanas dedicados a mejorar la práctica de un instrumento que se había convertido en su razón de vivir.
Estos ensayos en la clandestinidad se mantuvieron durante meses y, luego, cuando ya avecinaba los 16 años, llegaron las primeras victorias en los festivales. Fue en ese momento cuando su padre se enteró por primera vez de esos encuentros encubiertos con el acordeón. Tremenda sorpresa la suya.
Estos ensayos en la clandestinidad se mantuvieron durante meses y, luego, cuando ya avecinaba los 16 años, llegaron las primeras victorias en los festivales. Fue en ese momento cuando su padre se enteró por primera vez de esos encuentros encubiertos con el acordeón. Tremenda sorpresa la suya.
El joven Franco Argüelles vio en esos festivales una posibilidad de transformar su pasión en verdadera fuente de recursos y, por lo tanto, decidió incrementar su participación.
“Nada ocurre por casualidad”, comenta el compositor antes de exponer ese encuentro que advino poco después y que le cambió la vida. Atraído por su talento y sobre todo sus ganas de crecer, el gran Jorge Oñate lo contactó para invitarlo a una fiesta en Bogotá.
De ese encuentro nació una grabación inolvidable “El más fuerte” que enseguida dio lugar a otra colaboración destacable con Otto Serge (que terminó en los estudios de grabación pocos meses después).
La vida de Franco Argüelles está llena de esas coincidencias que hacen creer en la magia de la ilusión y del trabajo. Esa fuerza de voluntad que abre, poco a poco, todas las puertas.
Tras esa serie de logros afortunados, el hombre volvió a participar a los concursos regionales con empeño, seguro de que a través de ellos conseguiría la máxima exposición. Y los resultados no se hicieron esperar: “Gané como quince festivales –explica el artista– y de esta manera me gané la confianza de muchos cantantes”.
La estrategia funcionó. El primero de los grandes cantantes en mostrar interés por el joven acordeonero fue Iván Villazón quien le propuso firmar una serie de producciones musicales.
Con sólo 20 años, y gracias a esta alianza estelar, se abría para Franco un momento musical sin precedentes. La unión resultó fructífera y en pocos meses pudimos ver el rendimiento en temas como Noticia, Sin límites o Detalles (además de los Congos de oro que cayeron como manguitos maduros en la cesta).
Más adelante, empezó otro periodo fundamental en la carrera de Franco: su encuentro con Diomedes Díaz. “Con él fue que logré traspasar las fronteras”, explica el compositor.
Sin embargo, no todo son uniones en la vida del juglar. También están sus más de 250 composiciones (entre las que 180 han sido grabadas por cantantes reconocidos) y la mayoría de ellas basadas en vivencias personales.
“Cuando uno compone de mentira el éxito es de 15 días –comenta Franco– y cuando uno compone de verdad el éxito es mucho más largo”. Esa constatación lo empuja a observar a su entorno para crear y encontrar nuevas historias.
Así fue con temas como “El rancho no es mío” (que escribió al oír una pelea telefónica) y uno que en breve se oirá en todas partes: Mickey Mouse.
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Franco Arguelles / Biografia
hora, él mismo, amparado en el talento que el mundo vallenato le ha reconocido, decidió volar solito, apostarle a nuevas caras y sacar un disco suyo con un cantante joven: Luis Fernando Lúquez Vargas.
Quizás obedece a lo que dijeron los diomedistas cuando se separó del Cacique de la Junta antes de un mes de sacar el disco el año pasado: Que Argüelles estaría mejor en una organización donde él fuera la cabeza. Y así pareció entenderlo este polémico acordeonero que cumplió años esta semana (el 5 de julio), porque, precisamente, este fue el camino que tomó para realizar su nuevo álbum, titulado Llévame en tus manos.
“Quería darle un vuelco total a mi carrera artística”, explicó el acordeonero que fue pareja musical de cantantes como Otto Serge, Iván Villazón, Beto Zabaleta, Jorge Oñate y Diomedes Díaz. “Después de grabar con todos los cantantes de trayectoria –explicó–, he querido darles la mano a los jóvenes talentos y voces que vienen en el vallenato. Intento que ellos también se destaquen”.
Argüelles es muy, muy, muy polémico. Iván Villazón no recuerda que su separación haya sido muy feliz, tampoco Peter Manjarrés, a quien dejó en medio de una promoción de medios, para irse con Diomedes. El cierre con Diomedes no fue tampoco el mejor. Sin embargo, otros músicos a los que les ha hecho producciones lo defienden: Buen amigo, buen consejero, excelente productor. Y dueño de una imagen inconfundible: Pelo rizado largo atrás y una sonrisa de oreja a oreja que contagia optimismo.
“Primeramente –explicó–, cuando me separé de Diomedes Díaz, comencé a estudiar talentos de Valledupar y de la Costa Atlántica, para escoger una voz que acompañara a mi acordeón de ese momento para acá. Afortundamente, se hizo un reality con 15 voces y clasificó un joven de Sabanalarga (Atlántico), Luis Fernando Lúquez. Lo comencé a llevar a los espectáculos. Yo tocaba con otro joven que estaba en prueba, pero Luis Fernando fue el que más convenció, con el acordeón mío, con él grabé. Y el propósito es hacer una agrupación propia, llegarle a Colombia con la misma fuerza con la que comencé hace 15 años.
El reality del que habla, se hizo en Barranquilla y se emitió por TeleCaribe. Fue ahí donde Argüelles fichó a Lúquez. Hicieron unas pruebas en Valledupar, ensayaron dos canciones y así decidió que era la persona que más le convenía. Lúquez tiene 24 años, es abogado, su estilo está inspirado en el de Jorge Oñate y Poncho Zuleta.
¿Es un riesgo alto hacer pareja con un cantante que comienza?
Tengo una experiencia recopilada. Estoy jugando de local, porque con la experiencia que me da haber acompañado a más de siete cantantes de primera línea, juego para mantenerme vigente. Vuelvo a como era antes. Actualmente, no pasamos de cuatro los acordeoneros que tomamos la iniciativa de formar grupo y ser cabeza de ese grupo. Esto define la capacidad que uno tiene, el talento y cierto apoyo económico que a veces, muchos quisieran hacerlo y no pueden.
Además de la música, Argulles ama la ganadería. “Soy amante de los caballos, me gusta la ganadería. Aquí en la Costa tengo una finca. Es como una costumbre aprendida de La Guajira, todo lo que uno se gana lo invierte en el campo. Además, del contacto con la naturaleza vienen mis canciones. Cuando me pongo en complicidad con la naturaleza soy más creativo”.
Mal contadas, Argüelles calcula que tiene cerca de 180 canciones grabadas en diferentes voces del vallenato: Los Diablitos, Farid Ortiz, Diomedes Díaz, Iván Villazón, Jorge Oñate, Miguel Morales.
Quizás obedece a lo que dijeron los diomedistas cuando se separó del Cacique de la Junta antes de un mes de sacar el disco el año pasado: Que Argüelles estaría mejor en una organización donde él fuera la cabeza. Y así pareció entenderlo este polémico acordeonero que cumplió años esta semana (el 5 de julio), porque, precisamente, este fue el camino que tomó para realizar su nuevo álbum, titulado Llévame en tus manos.
“Quería darle un vuelco total a mi carrera artística”, explicó el acordeonero que fue pareja musical de cantantes como Otto Serge, Iván Villazón, Beto Zabaleta, Jorge Oñate y Diomedes Díaz. “Después de grabar con todos los cantantes de trayectoria –explicó–, he querido darles la mano a los jóvenes talentos y voces que vienen en el vallenato. Intento que ellos también se destaquen”.
Argüelles es muy, muy, muy polémico. Iván Villazón no recuerda que su separación haya sido muy feliz, tampoco Peter Manjarrés, a quien dejó en medio de una promoción de medios, para irse con Diomedes. El cierre con Diomedes no fue tampoco el mejor. Sin embargo, otros músicos a los que les ha hecho producciones lo defienden: Buen amigo, buen consejero, excelente productor. Y dueño de una imagen inconfundible: Pelo rizado largo atrás y una sonrisa de oreja a oreja que contagia optimismo.
“Primeramente –explicó–, cuando me separé de Diomedes Díaz, comencé a estudiar talentos de Valledupar y de la Costa Atlántica, para escoger una voz que acompañara a mi acordeón de ese momento para acá. Afortundamente, se hizo un reality con 15 voces y clasificó un joven de Sabanalarga (Atlántico), Luis Fernando Lúquez. Lo comencé a llevar a los espectáculos. Yo tocaba con otro joven que estaba en prueba, pero Luis Fernando fue el que más convenció, con el acordeón mío, con él grabé. Y el propósito es hacer una agrupación propia, llegarle a Colombia con la misma fuerza con la que comencé hace 15 años.
El reality del que habla, se hizo en Barranquilla y se emitió por TeleCaribe. Fue ahí donde Argüelles fichó a Lúquez. Hicieron unas pruebas en Valledupar, ensayaron dos canciones y así decidió que era la persona que más le convenía. Lúquez tiene 24 años, es abogado, su estilo está inspirado en el de Jorge Oñate y Poncho Zuleta.
¿Es un riesgo alto hacer pareja con un cantante que comienza?
Tengo una experiencia recopilada. Estoy jugando de local, porque con la experiencia que me da haber acompañado a más de siete cantantes de primera línea, juego para mantenerme vigente. Vuelvo a como era antes. Actualmente, no pasamos de cuatro los acordeoneros que tomamos la iniciativa de formar grupo y ser cabeza de ese grupo. Esto define la capacidad que uno tiene, el talento y cierto apoyo económico que a veces, muchos quisieran hacerlo y no pueden.
Además de la música, Argulles ama la ganadería. “Soy amante de los caballos, me gusta la ganadería. Aquí en la Costa tengo una finca. Es como una costumbre aprendida de La Guajira, todo lo que uno se gana lo invierte en el campo. Además, del contacto con la naturaleza vienen mis canciones. Cuando me pongo en complicidad con la naturaleza soy más creativo”.
Mal contadas, Argüelles calcula que tiene cerca de 180 canciones grabadas en diferentes voces del vallenato: Los Diablitos, Farid Ortiz, Diomedes Díaz, Iván Villazón, Jorge Oñate, Miguel Morales.
UN GRAN MAESTRO DEL ACORDEÓN ES EL CENTRO DE LA NOTICIA ESTE CINCO DE JULIO, PERO DE 1965, CUANDO
UN GRAN MAESTRO DEL ACORDEÓN ES EL CENTRO DE LA NOTICIA ESTE CINCO DE JULIO, PERO DE 1965, CUANDO NACE EN SITIONUEVO, CORREGIMIENTO DEL MUNICIPIO DE FONSECA GUAJIRA, EL ACORDEONERO VALLENATO COLOMBIANO, FRANCO ARGÜELLES, BAJO EL NOMBRE DE FRANCISCO JOSÉ ARGUELLES CORONEL, EN EL HOGAR FORMADO POR DON VÍCTOR ARGUELLES Y BELIA CORONEL. FRANCO, AL IGUAL QUE SU FAMILIA SE VA A VIVIR A SAN JUAN DEL CESAR, DONDE COMIENZA SU FORMACIÓN EDUCATIVA Y MUSICAL. ES ALLÍ DONDE LOGRA TERMINAR SUS ESTUDIOS EN EL COLEGIO SAN JUAN BAUTISTA Y EN EL COLEGIO MANUEL ANTONIO DÁVILA. SU VOCACIÓN, ES UN LEGADO DE SU PADRE, QUIEN ES ACORDEONERO Y ESPEJO DONDE FORJA SU CARRERA. RECORDANDO A FRANCO ARGUELLES,
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